// En algún pueblo de Grecia, año 2010\\
Alexandra Natchios no estaba en el mejor momento de su vida, con una madre casi ausente (y no por motivos de trabajo, ni que la había abandonado) y un padre "adoptivo" que era un amor, pero también estaba ausente, y una gran familia de locos; ella quería hacer algo con su vida... algo provechoso, algo que la animará un poco... "¿Qué puedo hacer?¿Qué puedo hacer?" se repetía mentalmente. Mientras miraba su portátil, aun aburrida y tomando su dosis de cafeína, vio algo interesante "Estudios de Veterinaria en Londres". Se le iluminaron los ojos mientras leía la página, siempre le habían gustado los animales y esta era una buena oportunidad.
- ¡DECIDIDO! .-grito levantándose de un salto y yendo a su cuarto para hacer las maletas.
A lo pocos días, ya estaba en suelo inglés y se había matriculado en la Universidad a espaldas de su familia. Un ligero acto de rebeldía e imprudencia, pero no quería discutir con su madre la misma discusión de siempre: Cásate con un buen griego, ten sus hijos y cebalos hasta que exploten. Aunque no importaba mucho, había tenido muchos novios griegos y ninguno era lo bastante bueno o luego les gustaba su madre, que gracioso, ¿verdad?
- ¡Alexandra! -escucho un grito detrás de ella que hizo que se diera la vuelta.
Entre la gente londinense vio a su madre con cara de enfadada, la cosa pintaba mal, pero por suerte estaba su padre al lado. Ya tenía alguien que la ayudará. Cuando su madre llego a junto de ella, la agarró de los hombros y la zarandeo, gritándole en griego y exigiéndole una explicación.
- Cariño, ya basta, cálmate y deja que se explique .-le pidió su marido.
- ¿¡Es que cómo se te ocurre hacer algo así, sin decir nada a nadie!? -preguntó su madre
- Esto es lo que quiero hacer, mamá, y no puedes hacer nada para impedírmelo. Ya soy mayor .-le respondió con cara cabreada que podía competir con la de su madre.
Como Hefestos (si, el dios Hefestos) les dijo que la calle no era el mejor sitio, fueron al lugar donde se estaba alojando Alex para discutir el tema largo y tendido. Paso un tiempo bastante largo, donde algunos residentes del hotel se asustaron por los gritos que había en la habitación, Hefestos se gano una migraña y más cosas que Alex no las veía lógicas:
- Sigo diciendo lo mismo, tengo 18, ya soy mayor y voy a estudiar lo que me gusta. No puedes impedírmelo .-repitió Alex con mucha determinación.
- De acuerdo, Entonces haremos esto a tu manera, pero como a los 23 no hayas conseguido nada... Volverás al Olimpo con nosotros y entonces te casarás con un griego.
- Hecho .- acepto el trato, pensando que iba a ganar de todas formas.
// Nueva Orleans, año 2014\\
Alex había pasado 4 buenos años estudiando en Londres y ahora estaba en Nueva Orleans trabajando, en el sitio donde vivía su querida prima, Dasha, algo bueno de su trabajo. Aunque no solo eso... estaba rodeada de tíos buenos, tíos buenos y un 4 por 1. No era que solo hubiera 4 chicos en su trabajo, no, no, no; es que el local pertenecía a un clan de katagarios osos que tenían más hijos que a saber de donde quitaban tantas ganas... ¡Y HABÍA CUATRILLIZOS! Aunque eran imposibles de distinguir, pero por lo que le dijo Dasha, el peor era Devereaux, pero todos eran iguales.
Acababa de llegar cuando le habían enseñado su lugar de trabajo y presentarle a la gente que serían sus "futuros pacientes", en un principio pensó que veía cuádruple, pero luego se fijo que eran distintos, lo que no distinguía eran los nombres de cada quién, salvo Remi. Le dieron la explicación más sencilla del mundo "No cabrees a Remi, es el que va de negro de pies a cabeza." Ese era el único al que distinguía, pero ahora eso daba igual, estaba en su trabajo y quería cafeína.
Salió del despacho de Carson, su jefe y mentor, para ir al bar a pedir un súper café bien cargado cuando choco contra alguien, lo malo es que era uno de los cuatrillizos que no distinguía:
- Lo siento... Este... Em... -intento adivinar cuál era.- ¿Cherif?
El hombre puso cara de mala leche, entonces se había equivocado.
- Soy Remi, maldita sea, ni que costará tanto distinguirnos. Joder .- se quejo pasándose una mano por el cabello.
- Dev, no confundas a mi plima o te lo haré pasar muy mal .- dijo Dasha que se aproximaba por el pasillo.
- ¿Eh? .-la pobre de Alex no se enteraba.- ¿Entonces eres Dev?
El rubio estiro los brazos, dónde vio la marca del doble arco y la flecha, la marca de su tía, Artemisa:
- ¿Eres un Cazador Oscuro? -pregunto mientras examinaba el tatuaje
- No lo es, solo es para fastidiar. ¿A qué si, osito?
Alex no supo si era por no responder o porque Dev estaba demasiado cansado para querer responder, pero apareció una lucecita en el suelo, de esas que les gusta perseguir a los gatos, entonces su prima intento coger la lucecita y se transformo en leopardo. Alex la observaba corretear por el pasillo y luego miro a Dev, este también la miro y le sonrió; fue entonces cuando ella sintió un gran "PUM" en el pecho.
- ¡Dev, no tiene gracia! -escucho el grito de su prima, mientras se apresuraba a alejarse a por su cafeína.
// Unos días después\\
Dev estaba en las puertas del Santuario, como siempre, vigilando que nada peligroso entrará al refugio paranormal que tenía su familia. Entonces vio que se acercaba un humano, no le dio importancia y le dejo entrar. A los pocos minutos, salió el mismo chico con Alex y eso le pareció muy raro; espero a que terminará su turno para ir a dentro y preguntar:
- Acabo de ver algo raro, Alex saliendo con un tipo raro... -comento mientras Justin, la pantera, le daba una cerveza.
- Es su cita, idiota .- respondió la pantera.- Estuvo con ella anoche.
Entonces, el oso sintió algo raro que no había sentido antes y que no sabía identificar.
- No parece adecuado para ella, ¿no? -comento sin pensarlo
- Oh~ El osito está celoso .-se burlo Dasha que estaba pasando por su lado.
- Anda, mira, es Nick .- dijo, señalando las espaldas de la chica
- ¿Nick?¿Dónde? -pregunto la chica dándose la vuelta rápidamente.
FIN
PD: Esto está basado en lo que he visto en mi cabeza, si lo ves chapucero... LA CULPA ES DE DASHA (?) Felichicades, Alex :3
